Este verano se esta caracterizando por un aumento de plagas de garrapatas. Las empresas de control de plagas vienen alertando de ello desde principio de la época estival.

Los días de más calor, como los actuales, coinciden cada verano con la mayor proliferación de garrapatas. No obstante este año, según la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla), las abundantes lluvias de la primavera han dejado una vegetación más frondosa, lo que se traduce en más presencia de parásitos que otros años.

Apuntan, además, que la plaga de garrapatas no sólo afectará al campo y a los entornos rurales, sino también a las ciudades.

¿Qué debemos hacer?

El primer paso para prevenir estos parásitos es revisar nuestras mascotas. El motivo del repunte por estas fechas, explica, es que los dueños de mascotas y, en consecuencia estas últimas, suelen pasar más tiempo al aire libre, por lo que aumentan las posibilidades de que estos insectos pasen de las plantas a los animales de compañía.

Así pues, una medida básica a tener en cuenta es revisar a los perros cada vez que se regresa de un paseo. Hay que prestar atención a la zona de detrás de las orejas, pero también la cara y pliegues del cuerpo porque se puede evitar que la garrapata se adhiera con fuerza a la piel.

Lo recomendable es que, si se va a ir al campo de vacaciones, se consulte con el veterinario y se elija alguno de los muchos tratamientos preventivos.

Explica que, además de los perros. las garrapatas pueden parasitar a otros animales como gatos y conejos «no tienen demasiados escrúpulos», por lo que es importante estar atentos si están en el jardín.

Acudir pronto al médico

Aunque no todas las garrapatas son vectores en la transmisión de enfermedades infecciosas, Comino aconseja que, si se descubre una garrapata en la piel, se acuda al médico lo más pronto posible «aunque sabiendo que no se trata de una emergencia vital».

Lo que no recomienda es tratar de extraer la garrapata en casa porque se puede quedar parte del sistema del animal en el cuerpo, lo que puede causar que se produzca una infección posterior que puede cursar con fiebre incluso días después. 

La recomendación es entonces acudir al médico que puede hacer la extracción de forma adecuada y hacer un seguimiento.

 

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